sábado, 5 de noviembre de 2011

Síntesis del argumento

La película Good Will Hunting, trata de un joven llamado Will, con problemas ante la justicia por sus reacciones contestatarias cargadas de violencia, quien trabaja como conserje en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT por sus siglas en inglés, una prestigiosa Universidad de Boston), el cual vive en un pequeño departamento con pocos muebles en un empobrecido barrio del Sur de Boston. Will tiene unos amigos, que como él, proceden de los barrios bajos. Ellos viven contentos con su situación y no hacen nada significativo para mejorarla. Su filosofía de la vida consiste en realizar un trabajo sencillo, comer, pelearse en la calle y sobretodo, beber.
Will fue un niño maltratado que inconscientemente se culpa por su infeliz desarrollo y convierte este auto-odio de una forma en auto-sabotaje, tanto en su vida profesional como emocional. Por lo tanto, es incapaz de mantener un trabajo estable o una relación amorosa estable. A pesar de esto, posee un potencial intelectual oculto, un “don” para hacer matemáticas, el cual es descubierto por el profesor “Lambeau” al verlo resolver un problema propuesto para los estudiantes en uno de los pasillos del MIT.
Como consecuencia de una de las peleas callejeras en las que se enfrasca, Will se ensaña brutalmente contra un joven, será juzgado y condenado y esta vez su elocuencia no le servirá para librarse del cumplimiento de la pena. En este caso, el profesor Lambeau logra rescatarlo de la cárcel, a través de la libertad condicional, adquiriendo su custodia mediante el pago de la fianza, a lo que el Juez accede bajo la condición de que trabaje junto con él una vez por semana ayudándole a resolver distintos problemas de matemáticas. A esta condición se agrega que acepte iniciar una terapia con un especialista en el área, siendo allí donde pone objeciones, pero con el fin de evitar la cárcel, termina aceptando.
El recorrido por distintos terapeutas (un total de cinco) tiene en todos los casos el mismo resultado: fracasan ante la manipulación que de ellos realiza Will, lo que “obliga” a Lambeau a buscar una alternativa que no sea la “ortodoxa” y recurre a un viejo ex amigo, “Sean”, (Robin Williams). Will se presenta ante él con la misma actitud que ante los otros terapeutas, encerrado en una coraza defensiva y casi “impenetrable”, procurando evadirlo, de repente observa un cuadro pintado por Sean y lo critica muy duramente, cuestionando la calidad del mismo e ignorando el valor que éste tiene, desde una perspectiva emocional para Sean. Se genera así un primer choque entre ambos, lo que lleva a Sean no solo a aceptar el caso, sino a reflexionar profundamente sobre lo que este “reto” significa para él.
Sean cita a Will en un parque y desarrolla un excelente monólogo en el que plantea la diferencia entre vivir para aprender, a aprender a vivir, dejando a Will sin posibles respuestas, ya que le hace notar que si bien él (Will) conoce objetivamente muchas cosas producto de sus lecturas y su aprendizaje “libresco”, él (Sean) conoce lugares, mujeres, libros, todo aquello que tiene que ver con la vida real, la cargada de polvo y sudor y matizada por los afectos, el amor, el dolor, las pérdidas, esas cosas que precisamente Will quiere evadir.
Un siguiente encuentro en el consultorio, Will permanece callado y Sean se mantiene en silencio durante toda la sesión, planteándose una especie de batalla en la cual el último que hable se encontraría en la condición de vencedor. Sean comprende esta situación y espera, solo así es posible que logre diferenciarse del muchacho y pueda obligarlo a romper sus defensas.
Durante el desarrollo de la película, Will deja en claro que es consciente de su “don”, pero como es algo que no le implica ninguna dificultad, lo mira con cierto desdén e incluso lo utiliza para humillar a Lambeau, máxime porque éste lo presiona para que acceda a puestos del mercado laboral que Will rechaza porque teme que su don se utilice para dañar a las personas en vez de servirles para vivir mejor.
En medio de esto Will conoce a una chica que estudia Medicina en Harvard, Skylar, con la que se enrola y establece una relación afectiva, pero esta situación le lleva al estar junto a ella, el tener que cambiar su mundo seguro, por un mundo cargado de sentimientos que le provocándole una sensación de inseguridad y miedo al que deberá hacer frente si pretende seguir con ella. Skylar le propone dejar Boston y marcharse con ella a California, y ante este reto, que significa abandonar ese mundo “seguro”, Will reacciona con violencia verbal, pero logra controlar su violencia física. Skylar deja a Will y se marcha.
Posteriormente, Chukie, el mejor amigo de Will le recrimina el no haber tenido el valor para seguirla, y para dejar ese mundillo, supuestamente seguro, dejando de aprovecha su don, a esto reacciona Will y se presenta ante Sean, y en una sesión cargada de confianza y en un aire lleno de seguridad para Sean, éste acosa a Will para que éste retome su pasado, lo enfrente y lo acepte, dándose cuenta que él es víctima y no victimario, que él fue el agredido sin razón aparente y que no es culpable de lo que le pasa, haciendo evidente que sus sentimientos se encontraban totalmente incontrolados. Will ya no tiene fuerzas ni recursos para enfrentarse a Sean y termina aceptando su situación y con ello se libera de los fantasmas del pasado, por lo que decide irse en busca de Skylar.

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